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No hay modo de que gane el PAN

    

CIUDAD VICTORIA, (ASI).— Alejandro Rojas Díaz Durán dio vuelta a la hoja para dejar en el pasado lo pasado y concentró toda su atención en convocar a los tamaulipecos a denunciar a los funcionarios del PAN-gobierno cuando pretendan cometer fraude electoral, para llevarlos a la cárcel.

En un nuevo video-mensaje, el senador suplente de Ricardo Monreal Avila, parece haber echado al olvido su pleito contra la presidenta nacional de MORENA Yeidckol Polvevnsky, y dirige ahora toda su metralla contra el titular del poder ejecutivo local, del PAN, y sus colaboradores del área política, a quienes atribuye querer ganar las elecciones al estilo Jalisco.

Alejandro Rojas se auto-proclamó candidato a la presidencia de MORENA al denunciar que bajo la conducción de la señora Polevsnky está convertido en un instrumento de dominación tipo Salinas de Gortari.

Ya no habla Rojas Díaz Durán de candidatos impuestos, de sobornos azules, simplemente llama a apoyar a los candidatos registrados y a impedir que el PAN-gobierno se salga con la suya a base de trampas y truculencias.

Todos los demás representantes, oficiales y oficiosos, de MORENA, siguen brillando por su ausencia, llámense Marcos Cruz Martínez, Enrique Torres, Antonio Leal Doria o el vocero de nombre exótico, jarocho para más señas.

Los candidatos del PAN-gobierno tienen apenas cinco días de campaña pero ya se percataron que no se trata de un día de campo, pues la gente los recibe con mala cara, a regañadientes, reprochándoles un montón de irregularidades imputables a su jefe, Cabeza de Vaca.

El problema es que los candidatos no están preparados para defenderse con propuestas de solución, o las que esgrimen están jaladas de los pelos, como la que usa en Ciudad Victoria el implacable recaudador de impuestos Arturo Soto Alemán.

Dice Arturo que el problema de desabasto de agua se arreglará con una inversión de 300 millones de pesos y que además, las llaves seguirán secas mucho tiempo pues no es fácil componer el tiradero que dejaron en la COMAPA los ex funcionarios, del PRI.

Es una paradoja, pero el más reciente gerente de la COMAPA tricolor, Gustavo Rivera Rodríguez, es ahora funcionario estatal del gobierno azul, y operador político de los candidatos del PAN.

Están peor los candidatos del PAN en Nuevo Laredo, pues las balaceras, persecuciones, bloqueos de calles y carreteras, apenas les dejan espacios para conversar con los vecinos, y no saben cómo responderles cuando les preguntan por el presidente municipal Enrique Rivas Cuéllar.

Imelda Sanmiguel, Manuel Canales y Fernando García Aguiar, son los abanderados en Nuevo Laredo, condenados a la derrota porque la gente los identifica como réplicas, dobles, copias, clones de Enrique Rivas Cuéllar.

Y peor les va a los candidatos azules, cuando se hacen acompañar en sus recorridos por las calles, por Ismael García Cabeza de Vaca y Gerardo Peña Flores, que son igual de réprobos que Rivas, pero de dimensión estatal.

Apenas vamos en la primera semana de las campañas y el gobierno estatal, panista, está midiéndole el agua a los camotes pues mantiene en suspenso sus actividades de propaganda subliminal.

El INE, FEPADE y el propio Palacio Nacional, han avisado en todos los tonos, que no tolerarán intromisiones gubernamentales en las campañas, pues ahora los delitos electorales se pagan con cárcel, sin derecho a fianza.

Este piso parejo para los partidos políticos y sus candidatos es un escenario nuevo para la pandilla azul tamaulipeca, pues en el pasado se despacharon con la cuchara grande y las autoridades electorales no movieron un dedo para castigarlos.

Las dos últimas maniobras gubernamentales de carácter electorero son el anuncio de aumentos salariales a empleados eventuales, desde un 30 hasta un 95 por ciento, pagaderos además desde enero, y la incorporación al gobierno del Estado, de las estancias infantiles “abandonadas” por el gobierno federal.

Ambas noticias son una patraña. Los trabajadores recibieron en la siguiente quincena posterior al anuncio del aumento, de 30 a 50 pesos, algunos, adicionales a sus sueldos, en tanto que los dueños de las estancias fueron convocados a una reunión donde les regalaron despensas y juguetes infantiles.

Para adornar la noticia de que el gobierno estatal, panista, se haría cargo de las estancias infantiles, mandaron traer a la senadora Josefina Vázquez Mota, que les hizo la faena completa, con su declaración de que es el primero y único Estado, que asume esta responsabilidad.

“Rescate integral”, dijo textualmente la ex candidata presidencial, agregando que se trata de 265 estancias tamaulipecas, donde se atienden a 8,265 hijos de mujeres trabajadoras.

Ni se trata de un rescate ni mucho menos es integral. Las despensas fueron entregadas una sola vez a los dueños de estancias y son inadecuadas para la alimentación de los niños, la mayoría de brazos, que requieren dietas balanceadas.

Las estancias infantiles son negocios de particulares, que recibían un subsidio federal por cada niño atendido. Cuando se descubrió que algunos adulteraban el número de niños, para recibir más dinero, fraudulentamente, se modificó el esquema de apoyo a las madres trabajadoras.

Ahora el dinero del subsidio se entrega directamente a las madres trabajadoras, y ellas deciden si continúan asistiéndose en las estancias, o si pagan por el servicio a algún familiar o conocido de ellas.

Si el gobierno estatal, panista, se hubiera hecho cargo íntegramente, del sostenimiento de las estancias infantiles, como lo presumieron, lo mismo que la senadora Vázquez Mota, tendrían que hacer un desembolso mensual por más de seis y medio millones de pesos, equivalente a casi 80 millones de pesos al año.

No lo hacen simplemente porque es una erogación no autorizado por el Congreso local en el presupuesto anual. Es una simple bandera electorera.

Hasta la titular de la Comisión Estatal de Derechos Humanos se prestó a hacerle el juego a su patrón Cabeza de Vaca, con el anuncio de que fueron violados los derechos de los trabajadores de las estancias.

Si tuviera tantita vergüenza esta funcionaria, habría abierto una investigación de oficio en el caso del periodista Gabriel Garza Flores, fallecido en Nuevo Laredo, por culpa de funcionarios penitenciarios que no permitieron que recibiera atención médica oportuna.

El diputado local Alejandro Etienne Llano, del PRI, candidato a la reelección, pide a vecinos, que denuncien ante instancias legales, a funcionarios del gobierno estatal que los amenazan con quitarles despensas y becas, si no votan por el PAN.

Etienne visitó el tianguis La Estación y los oferentes le dijeron que es insoportable la crisis económica porque la gente que los visita ya no compra como antes. “No hay dinero”, se quejan.

Uno de los tianguistas se quejó de ser uno de los nueve mil empleados despedidos por este gobierno del PAN, integrado por personas sin experiencia, que llegaron “de fuera”, según la expresión textual.

Por cierto, rueda en redes sociales la denuncia de que el senador Cabeza de Vaca cobra moches a hoteleros que hospedan a policías estatales. Debe haber un error, porque Ismael no se ocupa de asuntos de pesos y centavos, sino otro de sus consanguíneos.

Cumplen años Eduardo Hernández Flores, El Chóforo para sus amigos; la guapa y talentosa periodista Daisy Herrera, el dirigente de la FECANACO Julio Almanza Armas, el colega de Matamoros Jorge Caleb.

También es día de fiesta para Enrique de Leija Basoria y Carlos Enrique Hernández Correa.

Correo electrónico: albertoguerra65@hotmail.com