Frenan la marcha de Alejandro Guevara
CIUDAD VICTORIA, (ASI).— Una amable lectora reprochó a esta columna estarse convirtiendo en nota roja y lo único que atinamos a decirle en descargo, es que no es por nuestro gusto sino que es lo que prevalece en el Tamaulipas de los vientos del cambio, con una sociedad aturdida por la violencia y que no puede reaccionar para plantarse con energía y exigir un cambio del estado de cosas.
Ayer no fue la excepción. Río Bravo amaneció con un reguero de bolsas llenas de partes humanas, tanto en el estacionamiento de un centro comercial como en la carretera, con grupos de delincuentes desplazándose a velocidad de vértigo, robando vehículos, golpeando gente.
Reynosa también tuvo su manto de sangre pues fuerzas armadas abatieron a dos sicarios que presuntamente empezaron a dispararles. En un episodio por separado, rescataron el cuerpo de un individuo con huellas de tortura y un impacto de bala en la cabeza.
Tenía sobre el cuerpo un narco-mensaje y a un lado, una calavera humana.
Las bandas rivales se están destruyendo entre sí pero produciendo además, daño colateral. El gobierno estatal, panista, no puede tomar control de la situación, pero tampoco reclama al gobierno federal una estrategia diferente y de buenos resultados.
La actividad económica de la región fronteriza está atorada por el clima de inseguridad que se padece, pero tampoco las cámaras empresariales han tomado una actitud de reclamo para exigir un alto al crimen.
El Congreso local y sus integrantes soslayan la ingobernabilidad pues los diputados se entretienen con temas intrascendentes, fútiles, para no meterse entre las patas de los caballos. Son muy prudentes.
Un diputado local del PRI, Mario Antonio Tapia Fernández, de Matamoros (¡tenía que ser de Matamoros, la tierra de Chuchín!) propuso en la más reciente reunión plenaria, que se prohíba a los regidores obtener un ingreso económico diferente a su sueldo oficial.
La iniciativa firmada por este muchacho, propone que los regidores dediquen tiempo completo a su función pública, es decir, que no se distraigan en otras ocupaciones, propias de su profesión universitaria, su actividad productiva comercial o cualquier otra cosa en la que quieran emplear sus ocios.
Esto es un disparate producto de la ignorancia, porque un regidor no trabaja por jornal, no es secretaria ni conserje, para cubrir horarios de ocho horas en oficinas de gobierno. No es un funcionario ejecutivo.
En todo caso, por analogía política, los diputados locales también tendrían qué renunciar a cualquier otra actividad económica, pues son, como los regidores, representantes populares electos por sufragio público.
Los regidores son concejales, electos para inspeccionar y vigilar a la administración pública, incluyendo el desempeño del titular del Cabildo, para certificar que ciña todas sus acciones al marco de la ley.
Igual que los diputados locales, los regidores son representantes de la sociedad ante el gobierno constituido, para defender los intereses de la gente. No se les puede atar a un horario laboral ni recluirlos ocho horas diarias en una oficina, porque no es esa su función.
Eso dice el marco teórico. En la realidad, en los hechos, los regidores que pertenecen al mismo partido que el jefe del Cabildo, son tapaderas, cómplices y encubridores de irregularidades, porque también reciben su tajada del pastel.
Igual que los diputados. Locales y federales.
Tenemos en Ciudad Victoria un caso concreto y actual. Fernando Arizpe García es regidor en el Ayuntamiento del PRI, aunque a él ganó esa posición a nombre del Partido Verde.
Desde un principio, El Güero Arizpe acreditó su personalidad de reclamante, crítico, demandante, que contrastó contra la actitud mayoritaria de sus colegas del tricolor, que todo lo aplauden, apoyan y aprueban.
Un regidor del PRI saltó a la palestra para tratar de descalificar la postura de Arizpe, con el razonamiento de que busca la reelección en la planilla Verde y por eso critica al Cabildo priísta, “para llevar agua a su molino”.
Buena argumentación, pero le cae el escupitajo en su propio rostro porque también su jefe Oscar Almaraz Smer va tras la reelección y usa el aparato propagandístico oficial “para llevar agua a su molino”.
Arizpe García denunció en la víspera al jefe de prensa del Ayuntamiento, de aventar la piedra y esconder la mano, pues induce ataques anónimos contra los adversarios y se corroboró con el anuncio de una página en Facebook que se dedicará a hacerle la guerra al regidor verde y a su familia.
En otros temas políticos, el periódico Hora Cero de Heriberto Deandar Robinson, publica números de su encuesta que mide preferencias tamaulipecas. Asegura que López Obrador registra un 51.7 por ciento de posicionamiento, contra 27.6 por ciento de Ricardo Anaya y apenas un 10.3 por ciento, de Pepe Meade.
En cuanto a la elección de Senador, concede el periódico no diario a Ismael García Cabeza de Vaca un 42.4 por ciento de ventaja, contra un 28.1 por ciento del médico Américo Villarreal Anaya, y un raquítico 16.2 a Yahleel Abdala Carmona y asociado.
Muy bien, dijo un escéptico, que preguntó con sorna ¿y de dónde sacan que Ismael tiene más aceptación que el propio Anaya?
Por cierto, Andrés Manuel López Obrador tronó en Tuxpan, Veracruz, contra los políticos que quieren heredarles cargos públicos a sus parientes, y señaló casos de Tamaulipas, de Yunes en Veracruz y Rafael Moreno Valle de Puebla.
En Chetumal, Quintana Roo, la PGR sentó un saludable precedente, al hacer encarcelar a un juez estatal y a un agente del Ministerio Público, por la travesura de haberle inventado un delito a un periodista y mantenerlo encarcelado nueve meses.
Los dos funcionarios cumplieron el capricho del Gobernador de la época, Roberto Borges, que ahora también está preso por delitos de corrupción, traído de Panamá donde estaba escondido.
La nota chusca corrió ayer a cargo de Alejandro Guevara Cobos pues chocó su camioneta en una céntrica esquina de Ciudad Victoria, por no respetar un alto fijo. Tiene fuero pero aceptó pagar los daños al dueño del micro que le destrozó la puerta del lado del co-piloto.
La noticia buena para López Obrador, es que el coordinador de la bancada del PRD en la cámara federal de diputados, renunció para unirse a su campaña.
La noticia mala es que asesinaron al candidato a presidente municipal de MORENA en un municipio de Guanajuato.
Otra nota sangrienta sujeta a confirmación, es que “levantaron” en San Fernando a un empleado del presidente municipal, panista, cuyo cuerpo apareció después, calcinado.
También en Altamira, autoridades estatales y municipales instalaron en la plaza principal una placa de homenaje a la activista social Miriam Elizabeth Rodríguez Martínez, lo que es un desplante de cinismo pues no hubiera muerto si le hubieran dado la protección que pidió.
Familiares de personas desaparecidas marcharon el 10 de mayo en ciudades de todo México, para denunciar que es una simulación la búsqueda gubernamental, tal como lo hizo aquí en su tiempo Egidio Torre Cantú.
Magdalena Peraza Guerra empezará mal el lunes su campaña de reelección, pues ya no tiene coordinador general y su planilla está coja.
En tanto que el malhechor tamaulipeco detenido por la policía estatal en Escobedo, Nuevo León, fue traído al penal de Ciudad Victoria, donde seguramente impedirán que “siga cantando” como lo hizo allá, revelando montos y nombres de sobornos entregados a autoridades locales y de Nuevo Padilla.
Cumplió años el periodista victorense Rogelio Rodríguez.
Correo electrónico: albertoguerra65@hotmail.com
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