El peor jefe de prensa, del peor Gobernador de Tamaulipas
CIUDAD VICTORIA, (ASI).— En la modesta opinión del autor de esta columna, el peor jefe de prensa de un gobierno estatal lo era Mario Ruiz Pachuca. Cuando Guillermo Martínez García tomó su lugar, le hicimos la broma de advertirle que no se dejara embrujar por esa oficina, pues podría convertirlo en una mala persona.
--“Tengo mi problema económico resuelto; yo no robaré dinero del erario”, dijo como respuesta el joven funcionario nativo de Ciudad Victoria pero llegado de Monterrey, donde tenía su residencia.
Ambos jefes de prensa, Ruiz Pachucha y Guillermo Martínez, tuvieron la feliz característica de convertirse en el alter-ego de sus respectivos patrones, pues además de ser voceros, eran consultores de cabecera, amigos íntimos, casi el poder tras el trono.
Guillermo Martínez García resultó ser el peor jefe de prensa, del peor Gobernador que ha tenido Tamaulipas. Mario Ruiz Pachuca nunca castigó el ejercicio de la libertad de expresión de ninguna forma. Memo se pasó de la raya.
Y también resultó ser más mano larga que su antecesor en el cargo, a pesar de ser rico de abolengo.
En los dos últimos gobiernos estatales no hubo propiamente una política de comunicación social. Mario y Memo dedicaron tiempo completo a atender otros asuntos de sus jefes, pero no delegaron la función de prensa en subalternos.
Eugenio Hernández Flores mantuvo una espléndida relación con periodistas, a título personal. Es apuesto, ingenioso, amable, extrovertido. Egidio Torre Cantú nunca ocultó su desprecio por la prensa y él mismo es agrio, desagradable, chocante, déspota, introvertido, seco, repelente, aislado, distante.
Hoy se cumple el día número 20 del nuevo gobierno estatal, panista, y seguimos sin tener una política de comunicación social. Es más, no hay todavía coordinador estatal de comunicación social.
Algo está estorbando el nombramiento del nuevo vocero, en una dependencia estratégica, vital, trascendente, que merece la mayor importancia.
Mientras tanto, el propio Gobernador Cabeza de Vaca atendió ayer a su llegada al palacio de gobierno victorense el reclamo de noticias de los comunicadores, con la revelación de que le faltan poco más de mil millones de pesos, para cubrir los compromisos económicos de cierre del año fiscal, en diciembre.
Egidio Torre Cantú dejó cuentas mochas aunque todavía no sabemos el monto, justo por la opacidad en el manejo informativo del nuevo gobierno. Mil millones de pesos son una montaña de billetes, que nadie sabe de dónde van a salir.
Dijo el Gobernador, panista, que con el dinero disponible no se alcanza a pagar la última quincena de diciembre ni la primera parte del aguinaldo. El viernes regresará a la Ciudad de México, para seguir tocando puertas en demanda de apoyo emergente.
Los gobiernos municipales están en peor situación económica. Dejados sueltos y abandonados a la mano de Dios por Egidio, los alcaldes salientes no dejaron ni papel de baño, según la expresión textual del diputado local El Chuma.
Son los nuevos alcaldes los que pagan los platos rotos, pues recibieron deudas vencidas y dinero insuficiente para pagar la primera quincena, especialmente Maki en Reynosa, de manos de Pepe Elías Leal, de quien se dice que está muy lejos.
Por su parte, Juan Diego Guajardo Anzaldúa tomó el toro por los cuernos al hacer llegar ayer a la Suprema Corte de Justicia de la Nación, el texto de la controversia constitucional entablada contra el gobierno estatal, panista.
Falló la estrategia diseñada en la secretaría general de gobierno, según la cual, el joven presidente municipal de Rio Bravo pondría resignado la otra mejilla. El pleito ya no tiene reversa porque ni siquiera hubo un intento de negociación. Faltó sensibilidad y mesura.
Los observadores, constitucionalistas, estiman que hubo un error de cálculo entre los funcionarios del gobierno del Estado. Su opinión es que cualquiera que sea el desenlace del diferendo, Cabeza de Vaca saldrá perdiendo.
Le ocurrirá lo mismo que al imprudente que se trenza a golpes con un minusválido. Si lo derrota y deja tirado, la gente le reprochará su exceso de fuerza, la rudeza innecesaria, que sea un aprovechado y le pedirán que se ponga con uno de su tamaño.
Pero si pierde el combate, lo humillarán restregándole en la cara que se dejó ganar por alguien de menos fuerza, pequeño, débil, frágil y de apariencia desvalida.
Sus colaboradores no escarmentaron en cabeza ajena y tiraron a la basura la enseñanza de la historia protagonizada por Cabeza de Vaca cuando fue presidente municipal de Reynosa. No quisieron verse en ese espejo y pronto conocerán las consecuencias.
Juan Diego Guajardo también empezó su chamba municipal con las uñas, pero ya se nota el cambio en Río Bravo, con la recuperación de cientos de toneladas regadas en las calles, pavimentos destruidos, lámparas de adorno. Empieza a haber orden y limpieza.
En Ciudad Victoria, la dirección municipal de Protección Civil a cargo de Medardo Sánchez Albarrán advirtió de lluvias hoy y mañana, recomendando a los ciudadanos tomar las precauciones debidas, especialmente si se producen tormentas eléctricas.
Justo el martes, el presidente municipal Oscar Almaraz Smer y el gerente general de la COMAPA, Gustavo Rivera Rodríguez, arrancaron los trabajos de limpieza, desazolve, chapoleo y el retiro de lodo, piedras y gravilla, en los casi 29 kilómetros de los 12 drenes pluviales.
Y ayer, los dos funcionarios regresaron para supervisar los trabajos, acompañados por vecinos y otros colaboradores del Ayuntamiento victorense. El contador Almaraz Smer repitió su instrucción de que sea permanente esta acción de prevención de inundaciones.
En tanto que en Matamoros hay conmoción social por el fallecimiento de la estimada profesora Martha Rita Prince de García, una profesionista que fungió como directora de la histórica secundaria número 1 “Juan José de la Garza”, donde estudió nuestra amigo y colega Jorge Rodríguez Treviño.
También estuvieron en sus aulas Manuel Cavazos Lerma y Tomás Yarrington Ruvalcaba y otros muchachos que luego se convirtieron en exitosos empresarios. Descanse en paz.
En Matamoros, el secretario municipal de servicios públicos, Humberto Zolezzi Carvajal, informó del levantamiento de más de cinco mil toneladas de basura y de la incorporación de otras unidades compactadoras antes de que concluya el mes.
Al mismo tiempo, el Ayuntamiento avanza en el saneamiento de colonias con la clausura de basureros clandestinos y la invitación a los carretoneros, de que se abstengan de concentrar la basura a cielo abierto.
En temas políticos, el PRI tamaulipeco tendrá menos ingresos por concepto de prerrogativas, pues el INE le descontará mensualmente cantidades que hagan luego un total de ocho millones de pesos, equivalente a la multa impuesta por incumplir reglas electorales.
Los candidatos de este partido no hicieron la oportuna presentación de sus informes financieros y ahora pagarán por ello. Por cierto, el secretario de elecciones tricolor, Héctor Villegas Gamundi, ahora cobra en el Ayuntamiento victorense como director de gobierno.
Y en Veracruz, es inminente que metan a la cárcel al Gobernador con licencia Javier Duarte de Ochoa, pues algunos de sus cómplices soltaron la sopa al confirmar que actuaron en su nombre al crear empresas fantasmas para apropiarse ilegalmente de cientos de millones de pesos del erario jarocho.
¿Y Egidio?, ¿dónde anda Egidio?
Correo electrónico: albertoguerra65@hotmail.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario